Glaucoma y práctica del yoga
15 mayo 2020 | Autor – Carmen Méndez Hernández
Algunas posiciones de yoga pueden afectar la Presión IntraOcular (PIO) en personas con glaucoma.
La PIO elevada es el único factor de riesgo modificable para el que el tratamiento tiene un efecto comprobado en la prevención o el retraso de la progresión de la enfermedad.
El glaucoma puede afectar dramáticamente la calidad de vida de las personas con pérdida visual de moderada a severa. Se anima a las personas con glaucoma a que lleven un estilo de vida activo y saludable, incluido el ejercicio físico. Las personas con glaucoma que practican yoga deben hablar de esta práctica con el oftalmólogo que les trata, para que les aconseje sobre el posible riesgo asociado a las distintas posiciones de yoga y otros ejercicios que implican la inversión de las posturas. Se les debe educar sobre los riesgos y beneficios del ejercicio físico y la salud de la visión en general, así como sobre cualquier otro factor que pueda afectar la progresión del glaucoma.
Los estudios iniciales sobre yoga y glaucoma solo analizaban la posición de cabeza, que mostraba un marcado aumento del doble en el valor de la PIO, mientras que en estudios más recientes se incluyen participantes sanos sin enfermedades relacionadas con los ojos y las personas con glaucoma que realizaban una serie de posiciones de yoga invertidas, incluyendo la posición de perro mirando hacia abajo (Pos.1), la posición de pie inclinada hacia adelante (Pos.2), el arado (Pos.3) y las piernas en la pared (Pos.4).
Se midió la PIO de cada grupo en varios hitos temporales, incluyendo mientras estaban sentados, asumiendo la postura y en reposo.







